¿Estás buscando reformar el suelo de tu casa? Posiblemente tengas dudas entre instalar un suelo de tarima o un suelo laminado, así mismo, si desconoces las diferencias entre cada uno de estos dos materiales, no te preocupes porque has llegado al lugar correcto.
En este artículo te explicaremos todo lo que necesitas saber en relación con estos dos revestimientos, es normal confundir estos dos suelos, ya que, tienen una apariencia similar, además de compartir algunas cualidades.
Es muy frecuente escuchar que algunas personas se refieren a estos dos suelos como si fueran lo mismo, debido a su apariencia y características en común. No obstante, son materiales muy diferentes, cada uno de ellos tiene sus propiedades, al igual que sus procesos de instalación.
De igual forma, es necesario conocer que los suelos de tarima están elaborados principalmente de madera, donde se utilizan piezas duras y nobles. Así mismo, cuando se habla de tarima “flotante” se está haciendo referencia a un sistema muy habitual de instalación, que requiere de una estructura que lo sostiene.
En cambio, los suelos laminados, están compuestos por diferentes capas, alguna de ellas de fibra de madera y otras de elementos sintéticos como melamina y resina a las cuales se le imprime un relieve buscando imitar diversos materiales, entre ellos, la madera.
Veamos entonces, algunas diferencias entre el suelo de tarima y el suelo laminado:
Los pros y contras de estos dos materiales te permitirán realizar una mejor elección, por supuesto basándote en tus necesidades.
Tanto el suelo de tarima como el suelo laminado son dos buenas opciones para instalar en tu casa, sin embargo, debes evaluar cada una de sus diferencias y escoger el material que se adapte mejor a tus necesidades. De igual forma, en Reiteman, empresa de reformas integrales situada en Madrid, estamos dispuestos a ayudarte en realizar la elección más adecuada para tu vivienda, así como, la instalación del material que tu decidas colocar.