Ya hablamos en su momento del mejor suelo para la cocina que pueda responder a las características de esta estancia. Sin embargo, en ocasiones, lo que nos prima es poner tarima en la cocina, sobre todo cuando buscamos un concepto abierto con el resto de estancias comunes, ya que así se crea una visión de unificación.
Por ello, hoy te traemos este post sobre las ventajas y desventajas de poner tarima flotante en nuestra cocina.
A continuación te indicamos las ventajas e inconvenientes, pero antes indicarte que si quieres instalar este tipo de suelo puedes solicitarnos presupuesto para una reforma en Madrid y te daremos la información de manera gratuita y sin compromiso.
Cuando hablamos de tarima flotante una de las ventajas más destacables es su fácil instalación, porque posee un sistema de clic que permite su perfecto encaje como si estuvieras armando un puzzle.
El mantenimiento de las láminas flotante es sencillo, simplemente con una mopa poco humeda y productos que no sean abrasivos, se mantendrá como el primer día, lo que las hace ideal en la cocina, ya que es un lugar que se ensucia constantemente.
Se instala directamente sobre cualquier superficie, no tienes que retirar tu antiguo suelo, siempre que este no presente ningún tipo de humedad y este nivelado.
Aunque parezca mentira, las tarimas flotantes son bastante resistentes al calor, por lo que no debes preocuparte porque el calor de la estufa las vaya a deteriorar.
Si comparas las láminas con cualquier otro tipo de suelo, es una de las opciones más baratas.
Si una lámina se astilla o presenta algún tipo de daño, tienes que reemplazarla. No se pueden reparar, o al menos nunca se verá igual.
Si la lámina es sometida a cambios frecuentes de niveles de humedad, puede deformarse, picarse y presentar moho, lo que es bastante complicado de controlar en una cocina. Sin embargo, si no tienes ningún tipo de filtración o menores en la casa que pueden soltar constantemente agua o cualquier líquido, puede que esto no te afecte.
Por muy bien que se haga el trabajoen el momento de instalar las tarimas, siempre quedará una pequeña línea o junta en donde con el pasar del tiempo se acumulará mucha suciedad.
Puede parecer algo tonto, pero esto es algo que puede llegar a irritarte mucho con el tiempo. Así que piensalo muy bien.
Si las tarimas flotantes te parecen fácil de colocar, este suelo te sorprenderá, es tan sencillo que cualquier persona sin ningún conocimiento en construcción puede hacerlo. Compras algunas de más y tendrás como reemplazar cualquier pieza que se deteriore.
Se puede acuchillar el parquet, por lo que puedes hacer que cobre vida después de que ya lleve un tiempo instalado.
Como te hemos detallado en este post, las desventajas de las tarimas flotantes en la cocina son pocas y sin mucha relevancia. Depende de ti tomar la decisión de poner una tarima flotante o alguna otra alternativa en tu cocina.